20 de febrero de 2011




Para que hoy vuelvas a mí con cara de inocente y esa voz de yo no fui. Mirá que adentro mío hay un deseo de venganza de hacer pagar tus culpas y dejarte sin fianza, pensar que ya no puedo ni adorarte como antes porque estoy ocupada en culparte. Quisiera encerrarte y no dejarte salir más mostrarle a los demás el dolor que me causas.

Culpable , sos el único culpable yo te acuso y te maldigo te destierro de mi alma y mi corazón.
Voy a crucificarte y a quitarte la razón, ponerte frente a frente con toda la procesión, toda esa gente muda que no tiene corazón. Hoy para mi estás muerto, muerto en vida y sin mi amor quedándome el silencio entre el odio y el rencor y abriéndote una causa de mil hojas de dolor.