9 de octubre de 2010

Hay vivencias que aunque parezcan insignificantes nos marcan a fuego. Sensaciones que queremos repetir sea como sea, cosas que nadie más que vos puede entender. Lo que nos define como personas es el modo que tenemos de sentir. Lo que nos define como mujeres es cuanto nos animamos a sentir. ¿Podes estar viva si perdiste tu capacidad de sentir? Dejas de sentir y vas separándote de lo que alguna vez fuiste. Vas dejando de ser vos hasta olvidarte de quien sos. ¿Cómo haces para mirar adelante cuando tu vida quedó atrás? Me duele su amor, su recuerdo, me duele acordarme de su cara, me duele no acordarme, me duele pensar que estará haciendo momento a momento. Sin el estoy vacía. Hoy tengo que arrancármelo de la piel, odiarlo hasta olvidarlo. ¿Cómo hago para arrancarlo de cada cosa, de cada pensamiento? Tendré que enojarme, enojarme con cada recuerdo, con cada vivencia. Tendré que enojarme con cada cosa que me recuerde a el, enojarme hasta odiarlo, y odiarlo hasta olvidarme de el.